viernes, 21 de diciembre de 2007
Brütal Legend
16 años después, y de la mano de Tim Schafer -gurú, colaborador de algunas de las mejores aventuras gráficas de la historia (las dos primeras partes de la saga 'Monkey Island') y creador de tantas otras ('Day of the Tentacle', 'Grim Fandango' y 'Psychonauts')-, un nuevo juego nos permite sumergirnos en el mundo de fantasía tolkiana, testosterona desatada y sexo de backstage del Heavy Metal. Su título: 'Brütal Legend'.
'Brütal Legend' promete ser una aventura llena de acción en la que controlaremos a Eddie Riggs (¡más Maiden imposible!), el roadie de una banda de metal, a través de un mundo gobernado por demonios. Su objetivo: reclutar un ejército para liberar a los humanos esclavizados.
Si las imágenes adjuntas no te han puesto los dientes largos, el apartado musical seguro que sí lo consigue. Para empezar, la banda sonora estará compuesta por temas de Black Sabbath, KISS y Candlemass, a los que -entre otros- se sumarán Judas Priest, Zakk Wylde, Wolfmother y Dio, quienes grabarán temas totalmente inéditos para la ocasión. Y en el apartado de voces, nada más y nada menos que Jack Black haciéndose cargo del protagonista, y Rob Halford, Ronnie James Dio y Lemmy haciendo lo propio con varios de los personajes secundarios.
El pavo de la derecha es Tim Schafer. Al de la izquierda no hace falta presentarlo, ¿verdad?
Todos los tópicos del género, dosis extra de violencia cartoon, y un humor sanote pero bruto a más no poder. Al gusto de los metalheads, vaya. Aquí tenéis el trailer.
Y los más impacientes ya tienen una serie de artículos de merchandising para saciar su hambre.¡Cómo molan las chapas!
Danko Jones
La portada, como veis, no es lo que se entiende por original (ahí están las carátulas de C.O.C. y Kingdom Come para corroborarlo); y muy posiblemente el contenido tampoco lo sea. ¡Pero a quién le importa!
Los once nuevos temas se han grabado en el Studio 606 de Los Angeles bajo la batuta del productor Nick Raskulinecz, y, puestos a repetirse, vuelve a contar con la colaboración de John Garcia, quien, junto al punk-rocker Pete Stahl (Scream, Wool, Goatsnake), interpreta el tema de corte stoner 'Forest For The Trees'. En su myspace ya se puede escuchar 'Code of the Road', la pieza que abre el disco y un rotundo puñetazo en los morros que hace presagiar -de nuevo- lo mejor.
Ah, y los tendremos de nuevo por aquí en dos fechas: el 18 de abril en Barcelona, y un día después en Madrid.
Tracklist:
martes, 18 de diciembre de 2007
Fates Warning
No sé qué andabais haciendo vosotros entre 1988 y 1991, pero durante aquel período servidor anduvo entregándose a fondo a descubrir una serie de discos que contribuirían, en el futuro, a ampliar mis horizontes musicales. Por entonces mis gustos no iban más allá del metal más ortodoxo (Judas, Maiden, Accept), el sleaze angelino (Mötley, Ratt, Poison) y el thrash procedente de ambos lados del Atlántico (Metallica, Kreator, Anthrax); y la verdad sea dicha, con semejante menú de tres platos mi régimen de acordes y corcheas, además de equilibrado, me proporcionaba energía y emoción a raudales. Pero algunas cosas estaban a punto de cambiar. En breve, el grunge (y con él, los sonidos menos agresivos) reinaría en medio mundo, y cientos de bandas metálicas se verían arrastradas a tomar tres caminos: reconvertir sus planteamientos, desaparecer o mantenerse firmes y condenarse al ostracismo.
Pero no pretendo hablaros de la gran crisis del metal en los 90, sino de un fenómeno paralelo -mucho menos mediático, y un tanto anterior en el tiempo- que me condujo a probar nuevas alternativas sonoras. Y es que resulta que, poco antes de la fiebre que se propagó desde Seattle, introduje en mi dieta una serie de discos que, a mi juicio, me prepararon para encajar lo que, en breve, se nos vendría encima. Os hablo de obras como 'Perfect Symmetry' y 'Parallels' de Fates Warning, 'Gutter Ballet' y 'Streets: A Rock Opera' de Savatage, 'Operation: Mindcrime' y 'Empire' de Queensrÿche, 'Images and Words' de Dream Theater, 'Control And Resistance' de Watchtower y tantos y tantos otros. Masterpieces (algunas en clave prog, otras con el sinfonismo como bandera) que, por irónico que parezca (¿se os ocurren dos subgéneros más dispares entre sí?), me abrieron mentalmente al rock más introspectivo de bandas como Pearl Jam, Soundgarden, Alice in Chains y derivados. Aunque tampoco hagáis demasiado caso a esta descabellada teoría que se me acaba de ocurrir. Yo mismo dudo de la validez de esta supuesta conexión entre el mundo prog y el planeta grunge...
En cualquier caso, mi primer contacto con Fates Warning se produjo a mediados de los 80, a través de una cinta de cassette que me prestó un colega; concretamente una recopilación -con temas de Tankard, Fuck Off y varios secundones más- que incluía el tema 'Kyrie Eleison', perteneciente al disco 'The Spectre Within' (1985). Lo cierto es que no sé muy bien qué me llamó la atención de aquella canción, pero os aseguro que no fue el timbre de voz de su cantante, igual o más irritante que el del ex-Agent Steel John Cyriis, otro sujeto que posee el don de sacarme de mis casillas cada vez que abre la boca. Por aquel entonces las tareas vocales en los Warning corrían a cargo de John Arch, una especie de Mónica Naranjo en clave metálica (y a sus excesivos agudos me remito) que grabaría los tres primeros discos de la banda ('Night on Bröcken' de 1984, 'Awaken the Guardian' de 1986, y el arriba mencionado).
No pasó mucho tiempo hasta hacerme con unos cuantos discos de la banda. La primera vez, además, por partida doble: 'No Exit' (1988) y su debut, 'Night on Bröcken'. Dado mi problema con su vocalista es evidente que este último no cumplió mis expectativas (sonido demasiado deudor de Maiden y crispantes agudos del cantante), lo cual no impidió que, poco después, me agenciase su tercera entrega, 'Awaken the Guardian', con el cual -esta vez sí- puse definitivamente punto final a mi relación con el señor Arch (y es que, a pesar de que en este disco la banda hace gala de una personalidad propia bien definida, lejos de cualquier reminiscencia con la Doncella, la voz del fulano es superior a mis fuerzas). 'No Exit', en cambio, rebasó mis pronósticos más optimistas. Admito que, a día de hoy, es un disco que tengo muy abandonado, y soy consciente que los más jóvenes lo encontrarán ampliamente superado, pero en aquellos años significó un intenso soplo de aire fresco. No inventaban nada nuevo, eso seguro (los temas de veinte minutos divididos en varias partes ya habían sido ampliamente explotados por Pink Floyd o Rush en el pasado), pero, en el ámbito del metal underground, semejante grandilocuencia les convertía en pioneros. Y luego estaba la distintiva voz de Ray Alder, con un registro no apto para todos los paladares pero que, sin embargo, a mí siempre me ha parecido un gran cantante (sólo hay que pinchar las versiones que grabara de 'In Trance' de Scorpions o 'Beyond the Realms of Death' de Judas Priest para constatarlo).
Los siguientes títulos en llegar a mis manos fueron 'Perfect Symmetry' (1989) y 'Parallels' (1991), dos discos con los que cortaban por lo sano con la tralla acerada de sus anteriores obras para arrimarse a sonidos mucho más melódicos, limítrofes con el AOR más comercial. Dicho distanciamiento del heavy más primigenio quedó subrayado con la incorporación de un nuevo baterista, el inmenso Mark Zonder, quien, con sus complejos y precisos ritmos, además de aportar un toque progresivo realmente high-class, añadió cientos de matices al sonido global de la banda. De todo ello se desprende que estos dos trabajos sean, sin género de duda, las crestas de su cima creativa.
'Inside Out' (1994) y 'A Pleasant Shade of Gray' (1997) les seguirían de cerca en sus planteamientos, con otro derroche de genialidad y técnica difícil de superar. Pero en este tramo final de los 90 me sumerjo de lleno en el Universo Popular 1, y con dicha zambullida una oleada de nuevas bandas (o al menos novedosas para mis oídos) se instalan en mi equipo de música. Social Distortion, Monster Magnet, Turbonegro, Supersuckers, Toilet Boys, Zeke, Backyard Babies... Es hora de aparcar la ampulosidad y abrazar la inmediatez, los decibelios y la chispa rockera. A pesar de todo, a Fates Warning no les pierdo la pista. Paso olímpicamente de detenerme en sus siguientes discos, eso sí -el doble en directo 'Still Life' (1998) y 'Disconnected' (2000)-, pero al menos les sigo desde la distancia.
En noviembre de 2004, mientras me hallo aportando mi granito de arena en la revista This is Rock, me envían el promo de 'FWX', el décimo disco de estudio de Matheos, Alder & Co. No exagero si digo que aquéllo no hay por donde cogerlo. Terrible de verdad, lo juro. No quepo en mi asombro, así que me hago con 'Disconnected', su anterior referencia, para comprobar si el declive que muestran en su más reciente obra les viene de lejos o es algo completamente nuevo. Con desagrado certifico que el dique se secó con el cambio de milenio. Definitivamente, es el momento de dar carpetazo al sopor y el hastío que me provocan los Warning, y hacer borrón y cuenta nueva. Adiós, amigos.
Pero... ¡oh, sorpresa! La despedida no es definitiva. La noticia hace unos meses de su visita a suelo hispano me pilla totalmente desprevenido. '¿Qué hago: voy o no voy?' En un principio opto por pasar de ellos, pero el día antes del evento me da un calentón y cambio de opinión. 'Coño, ya sé que están en horas bajas, sí... ¡pero es que son Fates Warning! Lo mismo no se me presenta otra oportunidad en la vida'. Con este ultimátum grabado en la cabeza está claro por donde voy a salir: tengo que asistir a ese concierto. Aunque me duerma de aburrimiento...
El día D llega, y ahí estoy yo, en la Sala KGB, comprando el ticket en taquilla. 25 napos. Adiós mi dinero y que sea lo que Dio quiera. Me convenzo de que, aunque la banda se halla estancada y en horas bajas, como mínimo interpretarán un buen puñado de clásicos. Al fin y al cabo es la primera vez que pisan el país, así que qué menos que dar un repaso a sus principales composiciones. Y qué demonios, aunque no sea así, por fin podré ver de cerca a cinco músicos excepcionales que tantas alegrías me han dado en el pasado.
A los pocos minutos de iniciarse el show comprendo porqué Fates Warning siempre fueron unos secundones: les falta carisma, entrega y saber estar. O, dicho en plata, son unos sosos de cojones. El único que se salva de la quema es el bajista Joey Vera (auténtico clon de Angelo Moore de Fishbone), a quien de vez en cuando se le iba la pinza de forma muy saludable. ¿El resto de miembros? Mal, muy mal. Matheos parecía estar disecado, Aresti con cara de susto, y Ray Alder con escasísima presencia escénica. Desgraciadamente esa actitud duró hasta el final del concierto, 90 minutos más tarde. Pero ése no fue el único factor mejorable: el sonido fue pobre, y el set-list dejó fuera muchas piezas imprescindibles, cediendo su lugar a soporíferos temas actuales. Lo único positivo: al ser su última fecha de la gira, nos regalaron un par de temas adicionales en los bises. Algo es algo, pero supo a poco.
lunes, 17 de diciembre de 2007
Overkill
No os voy a engañar: hace unos cuantos años que los de Jersey dejaron de colmarme de felicidad con cada nuevo lanzamiento. A mi gusto, y prescindiendo de su trilogía básica ('Taking Over', 'The Years of Decay' y 'Horrorscope', tres obras maestras del power/thrash metal de los 80's), sus últimos discos merecedores del notable fueron 'W.F.O.' (1994) y 'Necroshine' (1999). Lógicamente, según mi criterio, el resto de su reciente discografía está por debajo de esa cualificación, con lo cual, de todos esos discos sólo rescataría un puñado de canciones; las demás: pura y llana medianía. Y me pueden cantar misa en algunas revistas del medio; yo sigo en mis trece: D.D. Verni y los suyos andan de capa caída desde hace lustros. Con mucho, podríamos estar de acuerdo en que cualquiera de sus últimos trabajos supera a aquella mediocridad titulada 'I Hear Black' (1993), pero poco más, porque resulta indiscutible que, a pesar de la fuerza y la contundencia que desprende su material más cercano en el tiempo, Overkill han perdido en parte la facultad de escribir canciones que se te queden clavadas en el cerebro. Qué queréis que os diga, a mí es que cada vez me cuesta más encontrar himnos que se aproximen a los ya lejanos 'I Hate', 'Hammerhead', 'E.vil N.ever D.ies' y tantísimos otros...
En lo que sí estamos completamente conformes es en su capacidad para llenar un escenario y ofrecer un buen recital metálico. Ahí, amigos, pocos les pueden hacer sombra. Todavía recuerdo el buen sabor de boca que dejaron hace unos años en Barcelona en un doble cartel junto a Annihilator... Tremendos. Jamás una batería me ha golpeado tan fuerte el esternón como aquella noche. Aunque el hecho que llevo grabado a fuego en la memoria fue mi contacto –a codazo limpio- con un par de impresentables en la primera fila. ¡Madre mía! O su amor por el vocalista Bobby 'Blitz' Ellsworth rayaba en lo sexual, o los efectos de las drogas les hicieron creer que estaban ante un ídolo religioso. Cuánta devoción, por Dio. Todo el puto concierto alargando los brazos desesperadamente, intentando tocar una parte de su sagrado cuerpo... No deja de sorprenderme que el bueno de Bobby aguantase el chaparrón con un entereza digna de elogio, porque, si de mí hubiese dependido, aquellos dos imbéciles se hubiesen llevado una buena patada en los hocicos.
Volviendo al presente, y haciéndome eco de los últimos pasos de Overkill, hace un par de días cayó en mis manos el dvd que acompaña a la edición especial de 'Immortalis', su decimoquinto -¡decimoquinto!- lanzamiento de estudio. De las nuevas composiciones no tengo más que añadir a lo escrito en el primer párrafo; sólo me detendré un instante en recordar que 'Room Full of Sinners' (2007), el disco firmado por el proyecto paralelo de Bobby Ellsworth, The Cursed, me ha parecido mucho más entretenido, inquieto y refrescante que aquél. Y eso que los parámetros musicales por los que se mueven The Cursed son cualquier cosa menos un ejemplo de modernidad, más bien todo lo contrario; recurren al hard-rock clásico en detrimento del power, pero incorporan elementos que jamás soñaríamos en su banda madre: saxos, reminiscencias jazzísticas, susurros,... Una auténtica bocanada de aire fresco al estancamiento que padecen Overkill.
Centrándome de una vez en el dvd del que os hablaba, éste recoge la actuación que ofrecieron nuestros protagonistas en la pasada edición del germano Wacken Open Air Festival. Y si bien la posición que ocuparon en el cartel les obligó a diseñar un escueto set-list formado únicamente por 10 temas, los apenas 50 minutos de duración poseen más garra, sudor y entrega que el 80% de los conciertos que tenemos ocasión de ver normalmente. Echando un vistazo al set ('Rotten to the Core', 'Elimination', 'Necroshine', 'Thanx for Nothin', 'In Union We Stand', 'Wrecking Crew', 'Old School', 'Fuck You' y un par de cortes de su nuevo álbum, 'Skull And Bones' y 'Walk Through Fire' -a mi juicio, de lo poco rescatable de 'Immortalis'-) sólo me vienen a la cabeza los calificativos demoledor y aplastante; impresiones que durante el visionado de la filmación se cumplen con creces. Es increíble que estos cinco tipos, bien entrados en los cuarenta, salten a las tablas con la fiereza de la que nos hacen testigos. Sin ofrecer ni un segundo de tregua o respiro salen a matar, dejándose la piel y de paso regalándonos un auténtico chute de adrenalina en vena. Han pasado cuatro años desde la edición de su anterior dvd, aquel rabioso 'Wrecking Everything: An Evening in Asbury Park', y realmente resulta reconfortante comprobar que, por fortuna, todavía mantienen indemne su entrega sobre el escenario.
Una recomendación: si, como a mí, el nuevo material de la banda no consigue ponértela morcillona y, por tanto, la compra de 'Immortalis' no te supone un aliciente, con su edición especial (con el dvd como goloso bonus extra) no hay excusa que valga. Además, según se puede leer en algunas webs, en breve editarán el concierto por separado (¿tal vez incluyendo documentales y clips? ojalá), así que esta edición limitada de 'Immortalis' es una buena opción a considerar ahora que se acercan las Navidades. Si alguna vez te gustaron Overkill yo no lo dejaría pasar.
domingo, 16 de diciembre de 2007
Crashdiet
Pero el trío superviviente ha cargado las pilas con rapidez, y dos años después de su debut (un 'Rest in Sleze' al que, por falta de tiempo, en su momento sólo le dediqué un par de escuchas), vuelve a la carga con solvente sustituto finlandés a las voces, once temas con vocación de himno y la colaboración de Mick Mars en un par de ellos.
Cada cual tendrá sus favoritos, pero yo me quedo con el single 'In The Raw', y las igualmente cañeras 'Like A Sin', 'I Don't Care', 'Thrill Me' (que me trae a la memoria las melodías vocales de Stephen Pearcy al frente de Ratt) y 'XTC Overdrive' (ideal para corear con el puño en alto). El resto tampoco desmerece, pero creo que 'Die Another Day' y 'Overnight' suenan a Lordi más de la cuenta, y que 'Falling Rain' y 'Alone' son un pelín más moñas de lo permitido.
Pelos crepados, poses andróginas, mallas, medias y guantes de rejilla, maquillaje, calentadores de aerobic, bisutería del todo a 100... Un look de lo más glammy que ellos hacen compatible con el metal gracias a las camisetas de Pantera y Ozzy que lucen en sus fotos de promoción.
PD: Atentos a los trapitos que vestirán de aquí a unas horas en Barcelona.
viernes, 14 de diciembre de 2007
Hardcore Superstar
Dicho esto, que nadie busque baladas o medios tiempos en 'Dreamin' in a Casket' (2007), porque lo tiene bastante crudo. Estos tipos van a todo o nada, y no toman prisioneros. Quién hubiese imaginado que con las endebles credenciales que HS arrastraban, con discos que, en el mejor de los casos, no pasaban de correctos, los suecos se hayan convertido con el tiempo en una de las pocas bandas escandinavas que todavía tienen algo digno que decir. Y a los casos de Backyard Babies y Turbonegro me remito (el 'Retox' de los noruegos me parece lamentable). Pero la realidad es ésta: Hardcore Superstar se han convertido en unos auténticos supervivientes de su generación. Y todavía son jóvenes, así que, si el destino no les juega una mala pasada, tenemos buena música garantizada durante muchos, muchos años.
De aquí a unos días les tenemos de gira por nuestro país junto a Crashdiet. Estoy convencido que escenario que pisen, escenario que van a arrasar, pero el menda se va a quedar sin verles a su paso por Barcelona. C'est la vie. Tendré que conformarme con repasar su nueva docena de hits potenciales, de los que, si ya resulta complicado tener que descartar alguno, escoger tres como favoritos supone una auténtica misión imposible. Y eso que, admito, me costó un güevo entrar en harina. Así que, si habéis leido alguna crítica negativa en los medios acusándoles de haberse apresurado con el lanzamiento de este nuevo disco, vosotros oidos sordos. Uno de los Grandes de 2007.
Otro Más de Parecidos Razonables
El single, además del tema que le da título, incluirá un segundo corte, 'Studs And Leather', una pieza compuesta en 1999 que, ocho años después, por fin verá la luz. Pero la canción estrella es 'Beast Loose in Paradise', un tema compuesto ex-profeso para la banda sonora de la película finlandesa 'Dark Floors', una cinta de horror hospitalario con niña al frente en cuyo guión ha metido las zarpas el líder de la banda. El rock monster, además, también tendrá un papel importante en el film interpretándose a sí mismo en su faceta de ultratumba.
Recordemos que no es la primera vez que Lordi se involucra en el mundo del celuloide; en 2004 protagonizaron el mediometraje 'Lordi's The Kin', el primer título de su filmografía.
Aquí tenéis el link de Solar Films, la productora de la cinta.
jueves, 13 de diciembre de 2007
The Punishers
Hacía mucho, mucho tiempo que no preparaba un cuestionario, pero la semana pasada me lié la manta a la cabeza y me saqué de la manga casi una treintena de preguntas. Y con la misma rapidez que fueron redactadas han sido contestadas por Dani Thunder, Charly Günner y Dr. Hangover. Gracias a los tres, compadres.
Esta mejora en el sonido ¿se ha debido por haber contado con un mayor presupuesto, más tiempo para grabar, por el personal tras los controles, o ha sido una mezcla de estos tres factores?
¿Qué ha motivado todos esos meses en el estudio (faltaba pulir los temas, tal vez)?
Dani D. Sevillano ha ejercido de co-productor, ¿quien es este hombre y cómo contactasteis con él?
Para el máster habéis contado con el finlandés Mika Jussila, ¿en qué os basasteis para escogerle?
H: Fue una recomendación del propio Dani. Ya había trabajado con él y estaba convencido que era lo que más le convenía al disco para darle el brillo y la contundencia necesaria. Además, que la relación calidad-precio, comparado con otros estudios de mastering de España, era mejor.
H: Los coros están muy cuidados; primero, porque era lo que requerían las canciones, y segundo, porque a Dani le gustan mucho y hace que suenen muy bien. De hecho la D es de 'Desmond' -por Desmond Child-, que es como le llamamos desde que se empeñó en grabar un montón de voces dobladas en 'Die Young'.
Uno de mis riffs preferidos es el que da inicio a 'One last chance', de lo más épico.
H: Esa es mi canción favorita del disco, sobre todo porque es un tema que costó mucho parir. Teníamos un montón de buenas ideas para hacer un tema largo, 'mastodóntico', como los llamamos, pero hay que tener cuidado con estos temas. Si no los trabajas bien te puede salir una pesadez de 7-8 minutos interminable, y a nosotros siempre nos ha gustado ser muy directos. Lo trabajamos mucho, le quitamos cosas, le añadimos otras y quedó un tema redondo; además de que, efectivamente, tiene un riff épico de cojones.
H: 'One Last Chance' y 'Jailed or Dead'.
Thunder (T): 'Never Come Back' y 'Sleaze Warriors'.
H: Sí.
Como buen aficionado al porno, ¿cuales son vuestras preferencias?
G: Yo, la verdad, aunque lo pueda parecer, nunca fui un gran seguidor del porno. Yo soy de los que despachan rápido y a otra cosa, mariposa. You know what I mean. Pero a mí lo que más me pone es el rollo amateur del Youporn, por ejemplo, pero con tías buenas, eh…
Vuestra teoría de la estupidez de Bush es muy cachonda. Me he reído mucho.
G: La cuestión surgió porque no sabíamos cómo darle un mínimo de seriedad a un tema que dijese que a todo el mundo le encantan las tetas grandes. Pues hice un tema que dijese que está bien preocuparte por política y por lo mal que va el mundo, pero a la hora de la verdad… Everybody love Big Titties!
G: Ficción, ficción, ¡no jodas! Ja, ja. Tenía ganas de provocar a alguna feminista rancia, ¡pero no soy Tommy Lee!
Al retrataros en la portada como payasos, ¿venís a decir que Rock'n'Roll es un circo?
Sin desmerecer la presentación de discos anteriores, el trabajo gráfico de 'FHD' me parece tremendamente bueno.
T: A mí me parece brutal también. Original, y hasta diría que arriesgado, pero creo que el trabajo de Victor y Guti habla por sí solo… Dos artistas. Además, el rollo digipack triunfa también.
T: Contactos con el exterior hay. De momento lo único que se ha hecho efectivo es la inclusión de los temas en los recopilatorios de Perris Records y el 'Italian Job'. ¡Esperemos que la cosa vaya a más!
Lo de los recopilatorios de Perris Records ¿va a ir a más?
Explicadme cómo llegasteis a tocar en Italia este verano.
G: Tanto en el caso de Jamaro´s Appetite, como en Mötorhead, inexistente.
T: Yo vi vomitar a Steven Adler. ¡Ése ha sido el máximo trato! Y los roadies de Motör parecían majos.
H: ¿Trato? Motörhead, nada. Toy Dolls, nada. CJ Sleez, nada. U olemos mal o no tenemos suerte. O ambas, no sé.
La marcha de Hermes la habéis cubierto rápidamente. Su reemplazo, Nico, ¿fue vuestra primera opción desde un principio?
G: Yo, con Dani y otros dos colegas, hago un tributo a Misfits de vez en cuando. Pero nada serio.
H: Yo bastante tengo con los Punishers. Tenía con Thunder y Hermes una banda punk, Los Canelones, pero no hay tiempo para todo.
T: Yo sigo con Amon Ra aunque ahora estemos un poco paraos. Y Nico sigue con Bill Bullet, pero se lo toman con calma también.
El clip de 'Born to Rock' era la hostia. ¿Hay intención de grabar otro para 'FHD'?
H: Intención sí hay…pasta no. El vídeo de iBorn to Rock’ formaba parte del premio por el que pudimos grabar el 'Sleazy', sino no lo habríamos grabado. Si conseguimos pelas y alguien que nos grabe a módico precio, quizá haya vídeo. Esperemos que sea posible.
¿Cuáles son vuestros planes inmediatos (promoción, bolos, cruzar la frontera...)? ¿Alguna fecha cerrada para 2008 (a parte de la de Avilés)?
T: ¡Hay cosas interesantes que esperemos que vayan adelante! Pero de momento es mejor estar calladitos, ¡¡que si no se jode todo!!
H: Pues los planes son tocar, presentar el disco donde podamos y vender todos los cd's que podamos, para así reunir pasta para un hipotético tercer disco. ♠