19 de Octubre, Sala ACME, Cerdanyola
Si mal llevo el cómputo de ocasiones que han aparecido por este blog, peor todavía lo tengo con el número de veces que les he visto en directo, pero es que no me canso de reivindicar a una de las mejores formaciones que tenemos en este país. Y visto lo de anoche me reafirmo en mis convicciones. Auténtico tesoro nacional, con su rock'n'roll de aromas sureños los Vudú engrosan su legión de seguidores allá por donde pasan, depositando un poso en el paladar de los primerizos que aciertan al acercarse a verles sobre un escenario. Un poso de agradable regusto que madura con rapidez y que te empuja a repetir la experiencia Ron Vudú tan pronto como se te vuelve a presentar la oportunidad.
Con motivo de la vigésima edición del Festival Internacional de Blues de Cerdanyola ayer noche nuestros protagonistas se pasaron por la sala ACME para hacernos rockear, y, a pesar de la hora tan intempestiva a la que dio inicio el recital y del cansancio que arrastrábamos todos los allí congregados (los miembros de la banda un poco más, dado el pantagruélico menú que se habían metido entre pecho y espalda unos minutos antes), la velada se saldó con una entrega a prueba de bombas y casi dos horas de música. Dos horas en las que dejaron caer ocho de los once temas que conforman su debut, además de un suculento puñado de covers (a sus habituales interpretaciones de 'Mueve las Caderas', 'Call Me the Breeze', 'Freebird' y tantas otras, nos sorprendieron en los bises con una relectura 100% pantanosa del 'Revolution' de los Beatles).
Convertidos definitivamente en sexteto, los Vudú declaran encontrarse en su mejor momento tanto a nivel personal como creativo, y lo cierto es que razón no les falta; primero, porque la camadería que se respira al verles sobre las tablas es especialmente intensa, y, segundo, porque ya tienen listos cuatro nuevos temas de cara a su segundo disco. Ayer mismo presentaron uno de ellos, un vacilón 'Corazón de Rock'n'Roll' de sabor Stones que nos hace presagiar que todavía nos quedan grandes cosas por oir de estos tíos.
La nota negativa a tan grata velada la puso un percance con las pilas de mi vetusta cámara digital minutos antes de iniciarse el show, quedando esta crónica coja de imágenes. Sin embargo, y como suele decirse, no hay mal que por bien no venga; así que, si tenéis curiosidad de verles la jeta, pasaros por su web y llevaos un susto (http://www.ronvudu.com/).