La entrada de hoy es especial -ya lo habréis notado por el nuevo cambio de cabecera- por varios motivos:
1. ésta es la primera entrevista que se publica en el blog,
2. lo hace en exclusiva nacional, y
3. lleva asociada nombres de primera fila, los de Steve Morse y Xavier Rulló, presencias que, tanto por una parte como por otra, me llenan de orgullo y satisfacción.
La charla, que tuvo lugar durante el pasado Azkena Rock, se ha dividido en 2 partes; así que, al tanto, que habrá más Morse.
“Hace poco fui con mi hijo a uno de los conciertos de reunión de Mötley Crüe y el personal de seguridad no nos dejaba entrar. Nos decían que no estábamos en la lista, como al chico de la película ‘Casi Famosos’. Supongo que ya sabes de lo que hablo (risas). Finalmente les convencimos, y tras el concierto, Mick Mars se hizo unas fotos con mi chico; incluso le regaló unas púas sin necesidad de pedírselas”. A Steve Morse (28 de Julio de 1954, Hamilton, Ohio, U.S.A.) le encanta conversar y compartir vivencias personales, incluso con un completo extraño al que ha conocido noventa minutos antes. La triunfante actuación de Deep Purple un día más tarde en el Azkena Rock Festival se convirtió en la excusa perfecta para departir de forma relajada con uno de los guitarristas más aventajados de su generación y maestro de maestros. El marco incomparable de la tranquilidad reinante en el bar del hotel más vanguardista (¡¡¡y caro!!!) de Bilbao, sin duda ayudó a que los veinte minutos asignados por el eficaz, aunque férreo tour manager de Purple, Ian ‘Spider’ Digence (“twenty minutes and no photos”), fluyeran naturalmente hacia una charla de hora y media. Enfundado en unas ceñidas bermudas vaqueras que seguramente nos podrían contar muchas batallas, con un tono de voz en todo momento relajado y sincero, aunque seguro y contundente, y ante una ración de cacahuetes bañados con un par de colas sin calorías, el guitarrista nos vendió su último disco con Purple ‘Rapture Of The Deep’ (Edel Records), además de recordarnos su trayectoria en Dixie Dregs, en la Steve Morse Band, su fugaz paso por Kansas, así como sus discos en solitario. Sin prisa y con una amabilidad inusual. 100% Steve Morse.
A estas alturas de tu vida y de tu carrera, ¿es necesario para ti pasar tanto tiempo alejado de tu familia con las constantes giras que haces con Deep Purple, Dixie Dregs, tu banda en solitario, y más recientemente, Living Loud?
¿Sabes?, este es el único aspecto de mi vida que no puedo controlar, es algo así como una pesadilla que no puedo dominar del todo. Este tipo de vida es como formar parte de una pandilla, o estás con ellos o no lo estás, pero en el fondo no puedes ni imaginarte el simple hecho de alejarte de ellos. Para mí lo peor es estar lejos de mi familia (larga pausa). Hace poco hablé con mi hijo acerca de ello y me dijo: “Papá, deberías pasar más tiempo en casa, aunque sé que todos los padres tienen que trabajar” (risas). Él ahora es un quinceañero, toca la guitarra y trabaja muy duro en ello, dice que lo ha aprendido de mí. Cuando estoy en casa puedo llevarle al colegio y luego recogerle, pasar todo el día con él. Tienes razón, a veces puede ser muy duro. El aspecto más doloroso de formar parte de una banda es que no puedo controlar el tiempo que estaré fuera de casa.
Es curioso, ni siquiera sabía que tenías un hijo. ¿Le gusta la música de Deep Purple?
Bueno, el grupo que realmente le gusta es Mötley Crüe, es su banda favorita. También le encanta Ozzy Osbourne. Hace poco grabé un disco con algunos de los chicos que trabajaron con Ozzy a principios de los 80 (ndr: por supuesto, Morse se refiere al proyecto Living Loud, junto a Bob Daisley, Lee Kerslake y Don Airey, ex miembros de la banda original de Osbourne), y allí descubrió todo ese material, oyendo a su padre haciendo algunas de esas canciones. Son temas que Bob y Lee escribieron junto a Randy Rhoads y Ozzy. Randy es un gran héroe para mi hijo. También tengo dos hijastros y dos hijastras, una gran familia con muchos chicos alrededor. A dos de ellos casi no los veo porque viven muy lejos, pero generalmente estoy rodeado de chicos (risas).
Parece que fue ayer, pero hace más de diez años que te uniste a Purple, y en breve se va a editar ya tu cuarto disco con ellos, ‘Rapture Of The Deep’.
Sí, desde que me invitaron a formar parte del grupo han pasado ya doce años, fue en 1994. Mi primer show con Purple fue en noviembre de ese año, pero ya formaba parte del grupo algún tiempo antes, mientras esperábamos el momento adecuado para debutar en directo con la nueva formación. Ese primer show tenía que llevarse a cabo en Australia, pero al final se decidió que iba a ser en Mexico City (ndr: las fechas exactas fueron 23 de Noviembre México City, 25 Monterrey, y 26 Corpus Christi, Texas).
‘Rapture Of The Deep’ es nuestro nuevo disco, una de las pocas veces desde ‘Purpendicular’ (ndr: su debut con Purple en 1995) en que la banda al completo se ha involucrado libremente desde principio a fin. En ‘Abandon’ (1998) Jon Lord estuvo ausente durante todas las sesiones de composición, aunque por supuesto participó de la grabación. Para el anterior ‘Bananas’ sucedió que Don Airey acababa de llegar, así que su influencia no fue demasiado fuerte, él era el “chico nuevo”. Con ‘Rapture’ no hemos tenido ninguno de esos problemas, la banda al completo ha participado enormemente, así que es mucho más representativo del sonido real del grupo. Es un disco muy fácil de escuchar, el sentimiento general es muy natural. Hemos intentado huir de canciones compuestas separadamente por algún miembro en particular, y nos hemos dirigido hacia un terreno más natural que nos ha permitido improvisar rápidamente. El sonido global es típico Deep Purple, y tengo que decir que después de pasar los últimos doce años con los chicos del grupo, la habilidad de componer música espontánea es algo muy importante. Básicamente este es el sentimiento que hemos querido capturar en el disco, pienso que es una buena representación de los Deep Purple actuales.
Durante estos doce años te has convertido en un miembro clave de los Purple sin Ritchie Blackmore. ¿En algún momento, durante los primeros días en el grupo, pudiste imaginar que sus seguidores te iban a aceptar casi de forma unánime?
Sustituir a componentes es algo habitual en las bandas de rock. En mi otro grupo, Dixie Dregs, hemos sustituido a bastante gente a lo largo de los años, hemos tenido muchos teclistas (risas). Por supuesto siempre habrá un sector de fans más radicales a los que no les gustará cualquier cambio que suponga alejarse de la formación de 1969, pero si realmente son puristas deberían preguntarse: “¿Y qué pasa con Rod Evans, el cantante anterior a Ian Gillan, o con Nick Simper, el bajista anterior a Roger Glover?” Por el amor de Dios, no podemos pedirle a Jon Lord que vuelva, las giras son demasiado largas para él. De cualquier manera, siempre que tocamos y Jon se encuentra en la misma ciudad, no dudes que subirá al escenario con nosotros. En este punto es imposible que seamos la banda original debido a razones que nadie puede controlar de forma individual. Pienso que los seguidores de Purple de toda la vida han llegado a apreciar mi contribución a la banda, ellos saben que yo no vine para echar a Ritchie del grupo, él se fue. Se fue (pausa). La única fórmula para que esos seguidores puedan continuar escuchando a Deep Purple es con un guitarrista diferente, y mejor si ese alguien es un fan. Yo soy un fan de Deep Purple, lo puedes comprobar escuchando cómo toco la música de Ritchie, las partes de guitarra que él compuso, se puede ver que lo hago con un enorme respeto por lo que hizo. Por supuesto soy libre para cambiar algunas cosas (risas), esto es lo que la gente se va a encontrar, un poco de aquí, y un poco de allí. Lo cierto es que la gente me lo ha puesto muy fácil, saben que me encanta la música de Purple, lo que hicieron en el pasado. Me gusta tocarlo básicamente porque soy fan de ese material.
Para la gira de presentación de ‘Rapture Of The Deep’ sería interesante que os centrárais en las nuevas canciones y en material de tus años en el grupo. Pienso que el grupo necesita dejar de tocar urgentemente algunas de las viejas canciones.
Es curioso que menciones esto, porque precisamente he llegado a Bilbao un día antes del Azkena Festival para poder ensayar algunas canciones nuevas con los chicos, y te aseguro que no es habitual que nos reunamos para probar cosas (risas). El día antes de mi primer concierto con Purple hicimos un ensayo largo, pero no suele suceder, puedes estar seguro. (Larga pausa) Tendremos que tocar bastante material nuevo, de eso no hay duda. Cuando tienes a cinco tipos en la misma habitación nunca sabes cuáles van a ser sus canciones elegidas para tocar en directo. Les he visto a todos en privado decir: “Oh sí, lo vamos a hacer así, vamos a tocar tal o tal canción”, y luego al reunirnos para tomar decisiones, dicen algo totalmente distinto. Nunca sabes lo que va a suceder. En este caso estoy seguro de que vamos a tocar material del nuevo disco.
Recuerdo que durante el primer tour que hiciste con la banda, confiábais ciegamente en el material de ‘Purpendicular’. Llegué a escuchar hasta siete canciones de ese disco en los dos conciertos en el Brixton Academy de Londres. Pienso que esa es la dirección adecuada.
El problema es que nuestras giras son muy largas, y llega un punto en que tenemos que plantearnos seriamente qué canciones tenemos que tocar para asegurarnos que Ian Gillan pueda cantar de nuevo al día siguiente. Por supuesto, a todos nos gusta más cuando el set list cambia cada noche. A veces, en la mitad de un tour muy largo, el encargado de las luces nos pide que toquemos tal o cual canción porque a nivel visual es mucho más atractiva. Tienes que saber que a lo largo de una gira hay mucha gente involucrada, no tan sólo nosotros cinco, y tengo que decirte que una enorme mayoría de ellos prefieren que la lista de canciones no cambie de forma habitual. Si tengo que ser sincero contigo, lo que yo realmente prefiero es que improvisemos mucho durante los shows, de esta manera si la gente nos ve varias veces seguidas, podrá salir con la impresión de que ha asistido a espectáculos diferentes. Estoy de acuerdo contigo, no tocamos demasiado material nuevo y quizás deberíamos, pero la razón es que hoy en día Deep Purple tiene muchísimas canciones para elegir. Además, en muchas ocasiones hemos compartido el escenario con otras bandas en tours conjuntos o festivales, y si queremos que todos los horarios se cumplan, tenemos que acortar nuestro tiempo sobre escena. Decimos: “Tenemos que eliminar ‘My Woman From Tokyo’ (sic) si queremos hacer ‘Black Night’ o ‘Hush’. Este tipo de decisiones son las que determinan el resultado de la lista final. Quiero que sepas que hay una voz que te representa en todas y cada una de las reuniones del grupo sobre el repertorio (risas). Es la voz que dice: “No debemos repetirnos porque hay gente que ha visto al grupo muchas veces”, y entonces aparece otra que dice: “Sí, pero hay mucha más que hoy vendrá por primera vez a un show de Deep Purple”, y la verdad es que esto es un hecho real, así que es muy difícil; no sabría decirte cuál es la respuesta a tu pregunta. Para mí la respuesta es cambiar más, aunque la audiencia pierda la oportunidad de escuchar unos pocos clásicos. No creo que tengamos que dejar de tocar muchos clásicos para poder incluir dos o tres nuevas canciones cada noche.
Hay tantas buenas canciones en vuestros tres últimos discos que es una pena olvidarlas tan pronto.
El año pasado solíamos tocar ‘Sometimes I Feel Like Screaming’, ‘Doing It Tonight’... (Larga pausa).
¿Cómo ves los discos que has grabado con el grupo al cabo de los años?
Como te dije antes, tanto ‘Purpendicular’ como el nuevo ‘Rapture Of The Deep’ son los discos que mejor representan a los Deep Purple recientes. Son más naturales, más de trabajo conjunto. Ese primer disco significó un perfecto retrato de aquellos Deep Purple post Blackmore, de la misma manera que ‘Rapture Of The Deep’ es un muy buen retrato de lo que la banda representa hoy en día. También me gusta mucho el disco en directo.
¿Cuál de ellos?
Tienes razón, hay tantos (risas). El que grabamos en Australia (ndr: ‘Total Abandon – Australia ´99’). No se retocó ni una sola nota en el estudio, ya sabes que a veces los grupos hacemos este tipo de cosas (risas). Lo que oyes en ese disco es exactamente lo que sucedió durante el show. Es lo más honesto que un grupo puede hacer, especialmente si lo que queda grabado es uno de los conciertos realmente buenos. Algunos discos en directo son completamente horribles, pero el de Australia es muy bueno, mi favorito. Con el tiempo pude llegar a apreciar algunas de las canciones de ‘Abandon’, pero tengo que reconocer que eché de menos a Jon Lord durante el proceso de composición: En esa época él estaba acabando su disco en solitario (ndr: ‘Pictured Within’), así que lo que hizo fue llegar en el último momento para añadir algunas partes de teclado. Jon es un tipo muy musical, puede hacer que cualquier cosa, por insignificante que parezca, suene bien. Lo hizo todo perfecto en un período de tiempo realmente corto, pero durante esa etapa en particular no actuó como un verdadero miembro del grupo. Amo a Jon, es un tipo enorme.
¿’Bananas’?
Creo que ‘Bananas’ es un disco con un sonido muy bueno. El productor Michael Bradford contribuyó con algunas ideas para las canciones. De hecho, su nombre aparece en los créditos de un par de temas (ndr: ‘House Of Pain’, ‘I Got Your Number’ y ‘Walk On’). Michael es un tipo muy inteligente y musical, cualquier cosa con la que se involucre va a sonar perfectamente. De cualquier manera, el proceso de composición de ese disco no fue el habitual en Deep Purple. Durante la grabación del nuevo disco, Michael no quiso participar en ese sentido y se conformó sentándose en su silla de productor (risas). Por eso pienso que ‘Rapture’ es mejor que ‘Bananas’, es mucho más un disco de Deep Purple como grupo.
¿Qué puedes decir ante las opiniones que afirman que la voz de Ian Gillan en ‘Bananas’ estaba en un plano demasiado destacado? Imagino que sabrás que en ciertos sectores de fans se opina que los Deep Purple actuales son algo así como la Ian Gillan Band...
Puedo estar de acuerdo en que el volumen de la voz de Ian estaba demasiado alto en la mezcla final. Espero que con ‘Rapture Of The Deep’ eso no vuelva a suceder. Tengo que decirte que la última mezcla que escuché de ‘Bananas’ era diferente de la que finalmente se usó, pienso que era mucho más apropiada. Estoy de acuerdo en que la voz de Ian no debió acabar en un plano tan destacado, yo soy uno de los que siempre lo dijo... No que seamos la Ian Gillan Band (risas), sino que el sonido final de ‘Bananas’ debió ser diferente. Pienso que Michael Bradford optó por un sonido global dirigido a poder sonar en la radio, pero en esta nueva ocasión le dijimos: “Michael, las cosas han cambiado en los últimos años, el negocio musical es diferente. Muchas bandas con sonido underground han conseguido alcanzar el éxito sin comprometer su sonido”. Tenemos claro que ya nunca vamos a ser los favoritos de las grandes emisoras y que la MTV no nos va a convertir en la nueva sensación dirigida a las chicas jóvenes. Cuando mezclas para un grupo, y todos quieren que su pista suene con más volumen, entonces has conseguido una mezcla perfecta (risas).
Eso no sucedió con ‘Bananas’...
No (risas).
Después de los dos volúmenes de ‘Major Impacts’ y ‘Split Decision’, ¿cuál es el siguiente paso de tu carrera en solitario?
En unas pocas semanas voy a hacer un show esporádico en Noruega, en el “Hell Blues Festival”, y estamos planeando grabar un nuevo disco con el trío (ndr: junto a Dave La Rue al bajo y Van Romaine a la batería, habituales acompañantes de Morse). También voy a trabajar en un disco no demasiado habitual, un proyecto acústico con una cantante increíble, una mezcla entre Sara McLaughlin y Alanis Morisette, tiene la voz más hermosa que jamás haya escuchado. Yo vivo en Florida y ella también, así que hemos podido trabajar juntos en casa, ya tenemos material grabado casi para un álbum completo. No estoy del todo seguro de cómo enfocar la edición de este disco porque básicamente es diferente. Sé que la gente espera de mí música instrumental intensa, así que deberé tener mucho cuidado para que la gente no se confunda al escuchar estas nuevas canciones, no quiero que la gente compre algo de lo que no van a disfrutar. Para estos casos, las tiendas on line que te permiten escuchar fragmentos de canciones antes de comprarlas son perfectas, pienso que es fantástico. Esta es la parte buena de Internet, todos conocemos su parte negativa (risas).
Hace poco hablé con Jimmy Barnes y me aseguró que en un futuro cercano vais a grabar un nuevo disco de Living Loud, en esta ocasión con material completamente original.
Sí, es cierto, esto es algo que va a suceder muy pronto.
¿Y qué me dices de la gira europea que se anunció y que tenía que llevarse a cabo este otoño?
Olvídalo. No va a ser posible porque con Deep Purple casi no hemos parado, y ahora con el nuevo disco en la calle no dispondremos de demasiado tiempo libre. Ya sabes que en Living Loud también toca Don Airey, así que un tour completo del grupo quizás supondría un conflicto con los intereses de Purple. Lee Kerslake, el batería, también está trabajando mucho con Uriah Heep, y Jimmy Barnes está casi siempre de gira él solo. Es muy difícil que todos nos podamos reunir para hacer un gira, aunque en unas pocas semanas sí nos encontraremos para comenzar a trabajar en el segundo disco.
Y aquí lo dejamos. De aquí a 7 días más.
(Podéis leer la entrevista completa traducida al catalán en www.metaltransfer.es.vg)
(texto y fotos: Xavier Rulló)
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